Fisioterapia para la tercera edad
La fisioterapia para la tercera edad se basa en tratamientos terapéuticos de las múltiples patologías que suelen aparecer a una avanzada edad. Estos tratamientos fisioterapéuticos están dirigidos a personas mayores de 60 años, debido a que a esta edad comienza este ciclo de vida.
Uno de los principales ámbitos en nuestro tratamiento es la prevención y la orientación a mejorar la calidad de vida.
La fisioterapia para edad avanzada no se debe practicar solo cuando se presenten síntomas o problemas de salud que requieran de dicho tratamiento, ya que se puede prevenir estas situaciones de riesgo a través de tres componentes fundamentales.
Los tres pilares de la fisioterapia para la tercera edad
- Fisioterapia preventiva: Es mejor prevenir una lesión que tratar las fracturas que puedan ocasionarse. Nuestro objetivo es obtener una buena amplitud articular, fuerza y un buen equilibrio en nuestros pacientes. De esta manera, se reducen considerablemente las posibilidades de sufrir un accidente.
Para ello, lo principal es evitar la pérdida de las capacidades motrices y generar un hábito de independencia en el mayor número de ámbitos posible, y así poder llevar una buena vida.
- Fisioterapia diagnóstica: Este tratamiento se emplea para valorar una lesión, un dolor o ante una caída, identificar la limitación de movilidad. Por este motivo, cualquier tipo de molestia debe ser tratado por un médico especialista para que determine el tipo de lesión o gravedad de ésta para recurrir al tipo de procedimiento adecuado.
- Fisioterapia tradicional, rehabilitación: De estos tres pilares de la fisioterapia, este es el más conocido. La rehabilitación es un proceso en el cual se ponen en uso un conjunto de técnicas fisioterapéuticas con el fin de recuperar y/o mejorar la funcionalidad de una estructura dañada y restablecer su estado habitual.
De este modo, la fisioterapia en los pacientes de la tercera edad es similar a otro tipo de tratamiento ordinario, a excepción de que debemos de adaptarnos a la psicología y necesidades de nuestros pacientes para proporcionarles una buena expectativa de recuperación, tan importante como el tratamiento en sí.
NECESIDAD DE LA FISIOTERAPIA PARA LA TERCERA EDAD
La principal función de esta técnica fisioterapéutica es mantener un grado de movilidad e independencia para nuestro bienestar. Por esta razón, los adultos mayores deben contar con este tipo de tratamientos para extender más su actividad y adquirir beneficios para la salud, y no ser solo vista como una terapia reparadora.
Por tanto, la fisioterapia para la tercera edad, mediante técnicas eficaces, trata deficiencias motrices, programa ejercicio físico adaptado, mejora la resistencia y el equilibrio, fortalece la fuerza muscular y valora la postura, orientando a recuperar la confianza en las capacidades de nuestros pacientes.